Hipanema

Pulsera Hipanema Los brazaletes Hipanema ya son moda en Europa y han conseguido conjugar el diseño francés con el colorido estilo brasileño. Así, las típicas pulseras veraniegas elaboradas con hilos de todos los colores y abalorios variados, se han sustituido por una única pulsera: la pulsera Hipanema. La idea es unir varias pulseras brasileñas de hilos, sustituyendo su cierre anudado por dos extremos metálicos que cierran con un imán. Este cierre, que además aporta un toque de diseño, permite poner varias pulseras brasileñas a la vez, evitando la difícil apertura de su nudo. Pero al lado práctico se une el conjunto de colores en el que están fabricadas y la variedad de materiales que incorporan. Así, a los clásicos hilos, de todas las tonalidades imaginables, se añaden materiales más resistentes como conchas, cuarzo, cristal, perlas y ¡todo lo imaginable!

La historia de Hipanema La historia de Hipanema comienza con el encuentro de dos chicas parisinas, Delphine y Jenny, en las playas de Río de Janeiro. Siendo ambas de París, simpatizaron enseguida y empezaron a comentar las interesantes pulseras de cuentas fabricadas a mano por los habitantes locales. En sus conversaciones descubrieron que tenían el mismo problema con estas pulseras: no era fácil retiralas. Las pulseras de cuentas brasileñas están hechas para no ser retiradas. Una vez se colocan en la muñeca, deben permanecer para siempre. Pero por desgracia, se desgastan muy rápidamente cuando se llevan de continuo y al final han de cortarse para ser retiradas. A su regreso a París, Delphine y Jenny decidieron que diseñarían una pulsera brasileña que se pudiese retirar. Fruto del trabajo de las chicas es una pulsera brasileña que se ajusta mediante un cierre magnético. Este cierre es lo suficientemente fuerte como para no abrirse en las circunstancias más comunes, pero se puede abrir rápidamente con un breve tirón. El nombre Hipanema lo eligieron por ser la combinación de la palabra hip y la popular región de Río de Janeiro, Ipanema. Todas las pulseras están hechas a mano y su popularidad se disparó en 2011. Sin embargo, es realmente difícil encontrarlas en tiendas minoristas fuera de Europa.